¿ES MI CASA UN LUGAR SALUDABLE?
Entender el Fengshui no es sólo comprender su origen, los conceptos en los que se basa y el modo en que entendemos el movimiento y los cambios de energía.
De hecho, quizás la parte más importante del Fengshui sea poseer esa sensibilidad a la hora de detectar si las energías que hay a nuestro entrono son favorables o no. Es cuando el Fengshui se convierte en el arte de entender las energías y las vibraciones de cada rincón de tu casa y de hacerlas resonar con las de sus ocupantes.
La ciencia del equilibrio de las energías
La primera clave para entender las energías reside en la propia definición de la energía en el mundo taoísta y del Fengshui. Aunque el carácter 气 en chino simplificado se puede traducir como Gas, Aire, Aliento, Clima, Olor, Vapor o Vitalidad, la palabra en sí está más asociada al concepto de flujo, de corriente de energía en constante cambio y en equilibrio.
Entender el Fengshui y las energías que le dan sentido nos requiere asumir que hay un flujo de energías en constante cambio dentro de nuestro hogar y que el verdadero equilibrio residirá en nuestra capacidad para adaptarnos a esos cambios de energía.
Conocimiento del entorno
Antes de preocuparnos y mirar dentro de nuestra casa hay que echar un
vistazo fuera de nuestra casa para entender que gran parte de lo que pasa
dentro está provocado por las energías de nuestro entorno.
En entorno nos dará varias claves esenciales del conocimiento de las energías.
Una calle, una plaza, un lago, un río, una casa en lo alto de un cerro…
todas estas características tendrán su implicación en el Fengshui del interior
de nuestra casa. Muchas de las intervenciones en el interior de una casa se
harán para equilibrar aspectos del exterior.
Así, si vivimos en la espesura de un bosque, estaremos acumulando un exceso energía densa y descendente del elemento metal (energía Yin) que deberá ser contrarrestada por energía Yang del Fuego en el interior de nuestra casa. En este caso, la decoración interior se hará para equilibrar un desequilibrio energético del exterior.
La ubicación ideal
Desde tiempos ancestrales, el Fengshui ilustra la localización ideal de una casa mediante la representación de la Montaña Dragón.
La montaña Dragón es una representación de la Estrella Polar y las 4 constelaciones que la protegen en la Tierra.
El resultado de esta localización ideal sería la de nuestra casa, protegida por montañas en la parte trasera, y por pequeños cerros en los laterales, dejando la parte frontal como la zona más baja y con mayores vistas, por donde idealmente discurre un río que es la fuente de vida (Qi en movimiento) de nuestro hogar.
Ciclos de Yin y Yang en nuestra casa
Si nos fijamos en la Montaña Dragón, ésta nos ilustra cómo la fuente de vida, representada por la energía Yang, viene de la parte frontal de la casa, lo que nos permite tener nuestra casa dividida en dos realidades energéticas: una zona Yin y una zona Yang.
Esa división de la casa coincide con el modo occidental de dividir nuestra vivienda, en zona de día y de noche. De aquí extraemos que es esencial que las zonas de día (Yang) y de noche (Yin) estén bien delimitadas, en espacio y en uso-funciones.
Conocer el uso de una habitación será esencial de cara a su decoración. No podemos tener la misma decoración para una cocina que para un dormitorio. En general, los dormitorios resonarán mejor con decoraciones sencillas y tonos tierra y pasteles (tonos Yin), mientras que en comedores y cocinas, los colores más fuertes, la decoración más abundante y los colores más cálidos serán bienvenidos (energía Yang).
Los 5 Elementos en nuestra casa
Ya sabemos que nuestra casa tiene dos polaridades energéticas (Yin-Yang) coincidentes con las zonas de noche y día.
Conocidas estas divisiones, el Fengshui nos permite ubicar cada uno de los 5 elementos.
A cada zona de la casa le corresponderá una de las energías de los 5 elementos que le atribuirá un carácter a esa zona de la casa.
En general, como regla universal, trataremos de evitar el conflicto entre energías, evitando que haya estancias con energía agua o fuego (las dos polaridades extremas) en el centro de la casa.
Además, a sabemos que cada uso de cada una de las habitaciones resonará con una de las energías de los 5 Elementos. Por lo general, aunque no siempre deberá ser así, trataremos que estas estancias estén ubicadas aproximadamente en el área donde reside la energía.
De este modo, cocinas o comedores, resonarán más en la zona Yang de la casa, mientras que los dormitorios y las áreas de descanso lo harán en la zona Yin.
El Fengshui tiene su parte creativa a la hora de identificar las energías que hay detrás de cada elemento. Así, podremos identificar lámparas, muebles, pasillos o escaleras al sol, montañas, ríos o cascadas de agua.
Con esta identificación nos será mucho más sencillo asociar unas energías a ese elemento.
Conocidas las energías de cada estancia, no hay más que conocer cuál o cales pudieran estar en exceso o defecto para proceder al equilibrio.
Conocido el carácter de nuestras habitaciones y estancias, podremos usar colores, materiales y texturas que resuenen con las energías propias de sus usos o de su ubicación dentro de la casa.
Tener la casa perfecta no es una cuestión de inversión o de años de estudio, sino más bien de un entendimiento básico de las energías, más cerca del sentido común que del conocimiento chamánico o de la superstición.
Juan Yruela Castillo
Arquitecto y experto en Fengshui
CEO y Fundador de Camino Holístico
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